Argentina 0 – Colombia 0
GANÓ VENEZUELA

El partido comenzó 17:05 en el Monumental de River Plate, 00:05 en Barcelona (en verano hay cinco horas de diferencia con Argentina). Así que me cambié el turno con un compañero de trabajo para salir antes, me compré un botella de fernet, unas latas de Coca-Cola y bicicletié hasta casa. Pongo Roja Directa antes de comprobar si lo pasan en la tele. Argentina y Colombia son el primer y el segundo equipo en la clasificación sudamericana. Higuaín, Messi y Falcao (además de Luis Suarez de Uruguay) encabezan la tabla de goleadores. Tododeportes lo pasará por televisión. Reposera, trago y a disfrutar.
Ya sabíamos que no va iba jugar Messi. Colombia también acusa una ausencia importante, la de Teo Gutiérrez. José Néstor Pékerman, ex de la selección albiceleste, alinea a Ospina en el arco; Zuñiga, Zapata, Yepes y Armero; Sánchez, Aguilar, Aldo Ramírez y James Rodríguez; Jackson Martínez y Falcao. Sabella hace lo propio, también con un 4-4-2: Romero; Zabaleta, Fede Fernández, Garay y Marcos Rojo; Di María, Lucas Biglia, Mascherano y Montillo; Higuaín y el Kun Agüero.
Saque desde el medio. Los primeros compases son alentadores. Argentina tiene tres chances claras en poco más de quince minutos, una de ellas incluso es un mano a mano del Pipa Higuaín que el gigante Ospina le saca con la punta de los dedos (digo gigante por su actuación). Colombia tiene una clara de Falcao que se choca un centro de Armero lanzado con fuerza desde la derecha. La albiceleste juega vertical, con Di María precipitado a veces pero siempre veloz mental y de piernas. El cuadro cafetero tiene un estilo más parsimonioso, toca bien, especialmente el armador James Rodríguez. Los laterales son unas fieras y arriba dan miedo. En el minuto 20 ¡gol de Jackson Martínez! Pero el juez de línea lo anula bien.
En el minuto 25 ataca argentina con Higuaín. Sale Ospina, cubierto por Zapata y chocan los tres. El defensor y el delantero, que estaba en el piso, se pican y se tiran dos pataditas de nena ¡EL ÁRBITRO A LOS EXPULSA A LOS DOS! Fatal decisión del venezolano Marlos Escalante que no pegó una en todo. A partir de entonces el partido se le fue de las manos. No tuvo diálogo, no supo conciliar. Cobró tarjeta amarilla por todo o casi todo. Los entrenadores estaban furiosos.
En el minuto 33 los de Pékerman se verán otra vez disminuidos por la lesión del enganche James Rodríguez. Juan Guillermo Cuadrado será su relevo. El moreno de la Fiorentina me hizo acordar un poco a Gullit jugando con entrega por el sector derecho de la mitad de la cancha. Tras la expulsión del central, el cuadro tricolor quedaría armado con un 3-4-2 hasta el final de la primera parte, mientras que Argentina lo hizo con un 4-4-1.
En la segunda parte entra Perea por Jackson Martínez y los dos equipos juegan 4-4-1. El partido se hace trabado, con menos chances. A los 8 minutos gol de Agüero, pero el juez de línea marco off-side. La posición adelantada es imperceptible comparada con la del primer gol inhabilitado a Colombia, pero existe. La falta de gol pone nerviosos a los jugadores. Las patadas se suman y Escalante saca tarjetas amarillas a todo el que proteste o vaya con pierna un poco fuerte: Zabaleta, Aguilar, Yepes, Zuñiga, Garay, Cuadrado…
A los 12´ del segundo tiempo se rejuvenecen las esperanzas del partido: entra a la cancha Leo Messi. El que sale es Montillo, de flojo partido. El público se emociona y alienta. Los colombianos también son muchos en las gradas a pesar de los incidentes con la entradas (muchos de ellos con ticket en mano no pudieron entrar). Las primeras incursiones de la Pulga, con un rival que acusaba el cansancio, fueron fructíferas. Dos minutos después entró Mejía, que será su marcador, por Aguilar. Veinte minutos más tarde Agüero marcará el tercer gol de la noche y el mismo juez de línea lo anula ¡una locura! A estas alturas, con mejía siendo la sombra de Messi y Colombia sin un armador, el partido se volvió una mierda. Lo más destacado fueron las actuaciones individuales de Ospina, Yepes, Armero y cuadrado en Colombia. El arquero estuvo dos veces por salir lesionado y aguantó el tirón (y nos perdimos de ver al gran Farid Mondragón, ex Independiente de Avellaneda). Mario Yepes demostró lo aprendido en calcio, yendo con autoridad a todas las pelotas divididas. Armero fue la gran pesadilla de Argentina por la banda izquierda y Cuadrado por la derecha. En cuanto a los de Sabella, destaco la labor defensiva de Fede Fernández, marcador de un difícil Tigre Falcao, al que por momentos anuló; la sorpresa que infringió Zabaleta en ataque y su solvencia defensiva. El primer tiempo y parte del segundo de Di María y Agüero.
No hubo nada más. El árbitro y el juez de línea se cargaron un partido que pintaba emocionante. Argentina se atora un poco la clasificación porque la próxima fecha jugará en la altura de Quito contra Ecuador, que sigue segundo a pesar de la derrota ante Perú, cuadro que visitará el Estadio Roberto Meléndez de Colombia en la misma fecha 14. Los de Pekerman por ahora quedan también segundos con 20 puntos.
¿Hubo gato encerrado en este partido? Recordemos que minutos antes, Venezuela le estaba ganando a Bolivia por 1-0, sumando así su punto nº 19 que la dejaba en posición de clasificación por encima de Chile, cuarta después de ganarle anoche de visitante a Paraguay (1-2). Pero Jhasmani Campos anotó el gol del empate en el minuto 42. O sea que es una realidad que a la Vinotinto no le convenía que Argentina o Colombia ganaran porque de aquí hasta el final no se enfrentará con ninguno de estos dos equipos. A su vez, de sus cuatro antecesores en la tabla solo Argentina y Chile no sumarán por tener la fecha 14 y 16 libre, respectivamente. (ahí la Venezuela puede sumar de a tres y pasar a Chile). En cambio Colombia y Ecuador jugarán todos los partidos de acá hasta el final, pero en ninguno enfrentarán a los venezolanos ¿será por eso que se anularon los tres goles? Algo de razón tenía Pekerman de quejarse de la designación de un árbitro procedente de un país involucrado en la competición. Había un formato en las designaciones que evidentemente no se respetó. Otra vez acertó José.

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