Argentina 3 - Uruguay 0
LA VENGANZA DE LEO


Argentina y Uruguay no se enfrentaban desde los cuartos de final de la Copa América, un encuentro que fue considerado el mejor del torneo. En la ocasión, ambas naciones se dirimían por conseguir el 15º título continental y Uruguay ganó por penales, encaminándose hacia el objetivo que lograría una semana después. Poco y mucho diferencian aquel partido jugado en Santa Fe con este por las eliminitorias que se disputó en Mendoza. El cuadro oriental conservó la base del campeón de América y también a su entrenador, el maestro Tavárez, mientras que Argentina despidió a Batista al finalizar el torneo. La selección albiceleste fue prácticamente la misma que jugó en Santa Fe. Solo Zanetti, Milito y Burdisso (lesionado) no contaron para el técnico Sabella en esta nueva cita rioplatense.
 
Argentina ganó por 3 a 0 y se quedó con el primer puesto de las eliminatorias (17 puntos) mandando a Uruguay a la 4ª posición (12 puntos, igual que Chile). El triunfo da confianza de cara al próximo enfrentamiento ante La Roja del Bichi Borghi en Santiago. También sirvió para coronar una noche mágica de Messi, que con sus dos goles alcanzó la punta de la tabla de máximos artilleros (6, junto a Higuaín y Luís Suárez) y los 30 en el equipo mayor, quedando a solo 4 del genio de Diego Armando Maradona. La facturación de Lionel en la noche cuyana se saldó con un tiro libre al mejor estilo Ronaldinho: remate seco abajo a la ratonera que Fernando Muslera no pudo contener, a pesar de una elástica estirada. Leo hace que valga la pena levantarse a las dos de la mañana para ver un partido desde España. Ya no solo es el mejor gambeteador, pasador y goleador. Ahora agregó la pelota parada a su repertorio. Esta Pulga no tiene límites.

Dejo a continuación un resumen del partido disputado en Mendoza y una puntuación hombre por hombre. Como siempre, se aceptan opiniones y críticas:

 

 
EL 1 X 1 DE ARGENTINA:


SERGIO ROMERO (6 puntos): Llegó con la desconfianza que le produjo una semana difícil en la que su equipo, la Sampdoria italiana, cayó derrotado ante el Chievo por culpa de dos errores suyos, el segundo un verdadero autogol. Pero le vino bien el error para hacer un cambio de chip justo antes de medirse contra el campeón de América. No tuvo fallos durante el partido, ni en el despeje ni en el achique. Aseguró las pelotas paradas, el arma letal de los uruguayos, y fue firme en el saque y la salida, jugándosela con Lugano en una acción en la que el capitán charrúa le rompió la mano derecha.


PABLO ZABALETA (6 puntos): Dio cátedra de lateral en una noche en la que tuvo que cambiar de banda por la lesión de Marcos Rojo. Como defensor no tuvo que trabajar demasiado porque su marcador, Edinson Cabani, estuvo más pendiente de marcarle la subida que de jugar al ataque. En el negocio ganó Argentina porque El Matador casi ni la tocó y Pablito se las ingenió igual para subir, aunque Mascherano un par de veces lo cagó a pedos por no cuidar la posición. 

FEDERICO FERNÁNDEZ (6 puntos): Sigue sin ser titular en el Nápoli, pero Sabella confía ciegamente en él. Juega de 2, anticipando, marcando y saliendo bien. Tiene mucha regularidad en la selección. En este partido solo tuvo un fallo ante Luisito Suárez, que le metió un caño en el primer tiempo, aunque la jugada la salvaron entre Zabaleta y Romero. Sigue siendo una garantía en el juego aéreo. En defensa le tocó el Matador Cavani en las pelotas paradas, que no tuvo ocasiones, y en ataque fue muy participativo.
 
 
EZEQUIEL GARAY (6 puntos): Digamos que este puntaje de Garay es producto de que su actuación se emparejó con la de Fede Fernández, mucho más regular en los últimos partidos. La culpa de los errores de zaga siempre se las llevaba el del Benfica. Pero ante Uruguay sacó la chapa del 6 que no te deja pasar una, ni por arriba ni por abajo. Mejoró su gran defecto que era la desconcentración en la pelota quieta defensiva (ver primer gol de Brasil en el último amistoso que jugó) justo contra un rival que es especialista en usufructuar los centros a la olla. El mérito también es de Sabella que apostó por mantener los mismos elementos en una defensa titular muy cuestionada. Ahora solo queda consolidar esta mejoría contra rivales menos peligrosos en ataque. A no desconcentrarse.

MARCOS ROJO (6 puntos): Era indispensable que apareciera y apareció. Sus últimas actuaciones dejaron mucho qué desear. A pesar de que él no se hace cargo de las críticas, es necesario que surja un 3 de confianza porque sino el equipo no supera los desequilibrios defensa-ataque que le permiten encarar partidos con mayor solidez. Su aporte como marcador de punta izquierda (a pesar de que Uruguay jugó muy mal por ese lado) ayudó a Garay a no estar tan pendiente de sus cagadas. Por primera vez lo vimos proyectarse correctamente, especialmente en el primer tiempo, llevando peligro más allá del algún que otro remate desafortunado pero necesario. Si él y Romero progresan, Argentina tiene cuadro como para salir campeón del mundo.
 

JAVIER MASCHERANO (8 puntos): Puede que no se notara tanto esta diferencia entre Mascherano y los defensores. Estamos acostumbrados a puntuar al jefecito por sus raspadas, por sus quites al límite. Claro que cumplió en lo de ser el tapón del medio, pero yo diría que en este partido Mascherano fue más líbero y distribuidor. Se coló entre los centrales en la salida. Sabella lo puso de último hombre en las pelotas paradas que Argentina efectuó en campo oriental, a las que arribaba con los dos centrales y un lateral, sabiendo que su condición es el anticipo y la velocidad. Abrió espacios con pelotazos a las bandas para Di María, Agüero e Higuaín, táctica que el equipo usufructuó muy bien ante Perú en Lima, en un partido cerrado como este contra los uruguayos. Ponerle un 9 sería exagerado, para eso le faltó el gol.
 

FERNADO GAGO (7 puntos): Volvió después de una lesión muy jodida ante Paraguay. En su papel de cerebro, es el complemento ideal de Mascherano: Gago se encarga de los pases interiores, a ras del suelo; su compañero de la distribución aérea hacia las bandas. Achicó bien y solo le vi un error más o menos grave en el segundo tiempo, cuando le pasó la pelota directamente a un uruguayo. Pero su amor propio le hizo retroceder casi 50 metros para recuperarla y, aunque no fue un quite directo, ayudó al equipo a armarse súbito en defensa. Con la recuperación de Banega seguramente entrará en la pelea por el puesto de 8. Pero yo ya me decanto por Pintita antes que por Ever.

ÁNGEL DI MARÍA (8 puntos): Con Di María hay que ponerse serios porque estamos ante el jugador más regular de la selección, incluido Messi, que suele tener altibajos porque los contrarios suelen plantear su táctica buscando anularlo. Ahora bien: ¿alguien me puede explicar de qué juega Di María? Yo tengo una teoría que se llama "matemática futbolística" y la voy a traducir en esta fórmula: Di María es la suma de Ardiles + Gento / Di Stéfano. De Ardiles bien podría copiarse el apodo de "El Socio de Todos"; de Gento tiene la explosividad del wing izquierdo, con el agregado de que Di María también puede aparecer por la banda derecha; de Di Stéfano tiene la sangre ítalo-argentina y un pistón llamado corazón que le permite jugar de todo y ser el alma del equipo. Como a Mascherano, solo le faltó el gol para sacarse un 9 en este partido.
 

SERGIO AGÜERO (8 puntos): El Kun volvió a la selección para ser ese delantero participativo y definidor. Se podría decir que jugó un partido para 7 puntos, pero el gol le suma, una anotación que permitió asegurar el resultado. También provocó un penal de Arévalo Ríos no sancionado por el árbitro en el primer tiempo. Es un jugador picante que no puede faltar como socio ideal de Messi en el ataque.




GONZALO HIGUAÍN (6 puntos): Con Lugano y Godín en el área, era normal que tuviera que abrirse a la banda o bajar a armar juego dado que no es un dotado de la gambeta. Le faltó su gol para sumar una actuación mejor. Tratándose del Pipa, máximo artillero junto a Suárez y Messi en esta eliminatoria, se hace casi imperdonable que no anote en una noche así. No obstante, hay que reconocer que el 2-0 se lo afanó el Kun, porque él estaba solo esperando en el segundo palo el centro de Di María.
 

LIONEL MESSI (10 puntos): Leo se ganó a la gente firmando autógrafos ya desde la tarde en Mendoza. Por la noche entró a la campo del Malvinas Argentinas dispuesto a perpetrar su venganza, masticada desde la eliminación de la Copa América. Sabía que el rival era jodido y por eso arengó al equipo al mejor estilo maradoniano. Una vez que sacó Argentina no paró de buscar el gol. En el primer tiempo, el rival oxigenado le cerró los caminos. Sin embargo se las ingenió para sacar una pelota que acabó en el parante externo del arco y que si llega a entrar nos tenemos que ir todos a dormir. Fabricando asociaciones en una baldosa, con Di María y Agüero especialmente, metió el 1-0 en el segundo tiempo, justo cuando Uruguay sufría la ausencia del capitán Diego Lugano, el referente del offside con el que Argentina quedó atrapado varias veces en la primera parte. Con el 2-0 vino una oportunidad de tiro libre, que la Pulga ejecutó al mejor estilo Ronaldinho por debajo de la barrera. Los minutos finales le dieron tiempo para tener una agarrada con Maxi Pereira que enamoró al público argentino.


HUGO CAMPAGNARO, PABLO GUIÑAZÚ y HERNÁN BARCOS: Campagnaro entró por Rojo, que se lesionó en la segunda mitad del complemento. Jugó de lateral derecho e intervino varias veces con seguridad. Es una alternativa muy aceptable para el puesto. Guiñazú, por su parte, entró por Di María para asegurar el resultado. Es un volante marcador de poca calidad en el armado del juego, al punto de devolverle una pared horrible a Messi tras un córner. Barcos, sustituto de Agüero, tuvo intervenciones inteligentes por el costado derecho, incluido un gol que el árbitro anuló por offside.




URUGUAY (en pocas palabras):


La formación: Fernando Muslera; Maximiliano Pereira, Diego Lugano (m.64, Andrés Scotti), Diego Godín, Martín Cáceres; Álvaro González (m.68, Cristian Rodríguez), Walter Gargano, Egidio Arévalo Ríos, Edinson Cavani; Diego Forlán y Luis Suárez

El arquero: Muslera atajó muy bien y fue una de las razones por las que Uruguay no se comió más goles. Solo en el primero sufrió la confianza de creerse tener asegurado el balón, sin contar con la velocidad supersónica de Messi para ir a buscar una pared al área. En el segundo y tercer gol no tuvo nada que hacer.

La defensa: Llama la atención que Uruguay haya recibido los tres goles luego de que La Tota Lugano saliera por una distención muscular. Andrés Scotti, único jugador del medio local, no cubrió bien la entrada de Messi en el primer gol y no pudo hacer mucho por evitar el segundo de Agüero y el tercero de La Pulga. Godín, por su parte, tuvo pocas intervenciones, una de ellas sin suerte disputando una pelota con el Kun (ex compañeros en el Atlético de Madrid) que terminó sancionada con tarjeta amarilla. Un capítulo aparte fueron laterales Cáceres y Maxi Pereira que nunca pudieron controlar los nervios. De los dos especialmente el primero me sorprende que todavía juegue en la selección. Con todo, se hace evidente que Lugano, sin ser titular en su club, el PSG, es indispensable para la Celeste.

El mediocampo: Muy defensivo. Solo Arévalo Ríos aportó clarividencia, aunque lo cierto es que no se podía esperar mucho más de Uruguay. Argentina de local es un equipo fuerte y hasta Cabani fue más cuarto volante que tercer punta.

La delantera: Lo peor lejos de Uruguay. Cabani marcando a Zabaleta (incluso cuando éste cambió de banda tras la salida de Rojo); Luís Suárez siempre peligroso pero intermitente; Forlán desconocido, haciendo aportes jubilatorios con unos remates asquerosos y sorprendentemente innecesarios. No metió ni un solo centro como la gente. Sin dudas lo peor de La Celeste.


Argentina y Uruguay cierran, como en el último Mundial, la eliminatorias en Montevideo. Esperemos que esta vez los de Sabella lleguen clasificados y no tengamos que sufrir como sufrimos con Maradona.


El Futbolólogo